Seguro que ya la conoces. La cuenta bancaria es el producto más utilizado por todos nosotros a la hora de tratar con nuestro banco y administrar nuestro dinero. Cualquier persona hoy en día tiene abierta una o varias cuentas bancarias en alguna entidad. Hoy en día no se puede vivir sin ellas. Así que prácticamente todo el mundo sabe lo que son.
De todos modos, vamos a hacer un repaso por sus características y funcionamiento, y ver que aspectos tienes que tener en cuenta para elegir la mejor opción y poder sacarle el mayor partido a tu dinero.
Descripción
Una cuenta bancaria, también llamada cuenta corriente o libreta de ahorro, es el depósito de dinero que haces en una entidad bancaria y que te sirve para tener tu dinero guardado a salvo y poder realizar las operaciones bancarias más habituales. Es por tanto un producto mayormente operativo y no tanto destinado para el ahorro.
A este tipo de cuenta se les denomina depósito “a la vista”, lo que significa que el dinero depositado está siempre disponible y su titular podrá retirarlo parcial o totalmente cuando él desee.
Debes recordar también que el dinero que depositas en una cuenta bancaria está garantizado por el Fondo de Garantía de Depósitos hasta un total de 100.000€. Así que, aunque el banco quebrara, tendrías garantizado tu dinero hasta esa cantidad.
Características de la cuenta bancaria
- Sirven para realizar la mayoría de operaciones bancarias, por ejemplo, las más comunes, como realizar o recibir trasferencias de otras cuentas, ya sean nuestras o de otras personas.
- Poder domiciliar recibos o la nómina.
- Poder asociar tarjetas de débito o crédito para hacer pagos o sacar dinero en cajeros.
- Puedes hacer un seguimiento fácil de los ingresos y gastos de tu economía personal.
Titulares en una cuenta bancaria
Las cuentas bancarias pueden tener uno o más titulares. Digamos que serían sus dueños legales.
En caso de tener varios titulares habría dos opciones:
- Mancomunada o conjunta: para realizar cualquier operación se necesita la firma de todos los titulares.
- Indistinta o solidaria: Cualquiera de los titulares puede realizar operaciones de forma individual.
Autorizado: tanto en cuentas con un solo titular, como cuentas con varios titulares, se puede nombrar a personas autorizadas que podrán hacer operaciones con la cuenta, pero no serán dueños de la cuenta y no tendrán responsabilidad en caso de fiscalidad o números rojos, por ejemplo.
Qué tener en cuenta a la hora de abrir una cuenta bancaria
Es conveniente siempre, antes de abrir una cuenta o contratar cualquier producto, estudiar las condiciones y leer bien la dichosa letra pequeña. Pero si hay algo que debes tener muy en cuenta a la hora de abrir una cuenta bancaria son las comisiones.
Los bancos te dan una serie de servicios a cambio de que les hagas el favor de depositar tu dinero en sus entidades, pero a veces para ellos no es suficiente con que les prestes tu dinero y también quieren quitarte un poquito, y eso lo hacen mediante las comisiones. Por ese motivo es tan importante que estés atento a esta cuestión.
Cada banco tiene unas condiciones diferentes y debes estudiarlas y compararlas para elegir las que mejor se adapten a tus necesidades, pero por norma general debes elegir la entidad que no te cobre comisiones.
Hay personas que están pagando dinero en comisiones a su banco pensando que eso es lo normal, pero créeme, no lo es. Que no te la cuelen, no pagues comisiones.
Afortunadamente, existen bancos que no cobran ninguna comisión. Elige el que más te guste o se adapte a tus necesidades, pero ya sabes que la premisa fundamental es no pagar nunca ni un euro de comisión. Sobre todo en lo que se refiere a mantenimiento, trasferencias, ingresos, mantenimiento de tarjetas, sacar efectivo en cajeros…
Otro aspecto importante a la hora de abrir una cuenta bancaria es la plataforma on line que tiene ese banco. Hoy en día casi todos los bancos ponen a disposición de sus clientes páginas web o aplicaciones móviles desde donde poder operar. Un banco que nos permita hacer operaciones por internet (y sin comisiones, recuerda) nos hará ahorrar mucho tiempo, y el tiempo a veces vale más que el propio dinero.
¿La cuenta corriente me da rentabilidad?
La cuenta corriente no tiene ningún tipo de rentabilidad ya que no es un producto de ahorro, sin embargo, hoy en día existen otros productos similares a la cuenta bancaria tradicional que sí ofrecen unas pequeñas rentabilidades o beneficios:
- Cuenta remunerada: las entidades que tienen este tipo de cuentas ofrecen una rentabilidad (más o menos baja) simplemente por tener depositado tu dinero. La cantidad que depositas está disponible en todo momento, y también se pueden hacer aportaciones puntuales de dinero de cualquier cantidad. Eso sí, tienes que tener en cuenta que este producto no es una cuenta bancaria en sí misma, por lo cual no te permite la domiciliación de recibos.
Un ejemplo de cuenta remunerada sería la Cuenta Naranja de ING Direct. Esta cuenta se puede utilizar como cuenta de emergencia donde tener el dinero para posibles imprevistos. Además, también puede servir para tener el dinero a la espera preparado para futuras oportunidades de inversión. Lo bueno de este banco es que no cobra ninguna comisión y además ofrece una pequeña rentabilidad. Ideal para usar como unas especie de hucha donde tienes el dinero siempre disponible, seguro y mientras está parado va creciendo.
- Cuenta nómina: en este tipo de cuentas, al domiciliar tu nómina (o hacer un ingreso mínimo mensual), obtienes una serie de ventajas, como una mayor rentabilidad por el dinero depositado, estar libre de comisiones, devolución de un porcentaje de los recibos, descuentos en gasolineras… Cada banco ofrece unas ventajas.
Como ejemplos de cuenta nómina están también la Cuenta Nómina de ING y la Cuenta Inteligente de Evo Banco. Una cuenta que no tiene comisiones, dispone de tarjetas gratuitas y puedes sacar efectivo en gran cantidad de cajeros sin comisión. También dispone de una buena plataforma online para realizar un seguimiento de tu dinero o realizar operaciones. Cumple todos los requisitos de los que te hablé anteriormente para elegir una cuenta bancaria.
Estos dos tipos de cuentas son solo unos ejemplos. Tienes a tu disposición gran variedad de opciones. Cada banco ofrece un tipo de cuenta con unas condiciones diferentes.
Los ejemplos de cuentas que te he puesto son las que yo utilizo personalmente y que me funcionan muy bien, pero eso no quiere decir que sean las mejores opciones para ti. Así que compara todas las opciones disponibles y elige la que mejor se adapte a tus necesidades. Yo solo te doy la información, pero al final eres tú el que tiene que elegir tu mejor opción.
De todos modos, recuerda que todo este tipo de cuentas debes utilizarlas para realizar todas tus operaciones bancarias más habituales, o usarlas como una hucha para emergencias. La parte de tus ahorros destinada a la inversión debe estar colocada en otros productos financieros más rentables, como depósitos, fondos de inversión, bolsa…
Resumen.
- La cuenta bancaria es un producto meramente operativo.
- Con ella realizas las operaciones bancarias más típicas y cotidianas.
- Debes elegir el banco que nunca te cobre comisiones.
- La entidad tienen que proporcionar una buena plataforma on line.
- Su rentabilidad es mínima, así que no debes tener todos tus ahorros aquí si quieres recibir una rentabilidad decente.
- Debes tener en la cuenta corriente la cantidad justa de dinero para realizar tu operativa diaria y tener cubiertas las necesidades habituales del mes.
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¿Y tú que bancos eliges para tener tus cuentas bancarias? ¿Pagas comisiones? Comenta tus experiencias.